Que más da ahora, terceras que primeras personas. El resultado es el mismo, omisión, tanta facilidad para unas cosas y tan poca para otras.
Me siento como el soldado que dejan atrás en la batalla, débil, olvidado, ignorado. Maldita retórica, llamemos a las cosas por su nombre. Son ya demasiados días.
Insensible apreciación del mundo que te rodea, me corrijo, imperceptible visión del mundo que no te gusta. Lo sé, me repito, siempre es más fácil mirar para otro lado.
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