Si fuera posible cruzar a un hombre con un gato, mejoraría el hombre, pero se deterioraría el gato. Mark Twain.
Hoy aunque parezca extraño sentí en mi piel, quizá mucho más dentro, el miedo irracional sobre el que tantas veces he teorizado. Escribo temerosa todavía mientras te siento venir a mi cama y acostarte conmigo. Sonrio, infinitamente. Me haces feliz con tu existencia callada al lado de la mia, con tu indeferencia y agresividad que te hacen especial. No te busco y no me buscas, pero estás en los momentos adecuados permaneciendo ausente en los excitados, que para esos sirve cualquiera. Me rio, mientras te miro y tú ausente a mi preocupada existencia, sigues en tu respirar armonioso y pausado.
Lo he pasado mal, demasiado mal. Quizá hayan sido los segundos en los que el miedo más fuertemente se haya apoderado de mi, irracional, pero te he visto débil, como sin vida y un terror frío me ha paralizado por completo. Habrá quien lo considere desmesurado, me da completamente igual. Es a mi a quien consuelas y animas con tan solo tu movimiento autoritario y despreocupado, es a mi a quien consuelas con tu maldita empatía gatuna que te hace venir a la terraza lamerme e irte sin más, porque yo no necesito más. Hoy al verte así me dio por pensar en todas las cosas que hemos pasado y en lo mucho que puedo llegar a quererte maldita sea.
Todo debe ir bien, no hay motivo para que lo contrario se produzca, pero tengo miedo, lo sigo sintiendo. Una mala cura, un pequeño descuido... Necesito verte de nuevo totalmente recuperada, mordiendo y arañando, cazando pájaros y jugando con perros que te triplican el tamaño...necesito volver a verte bien porque hasta que eso no pase no podré estar bien. Te necesito ocupando ese sitio imprescindible de mi existencia, recupérate Harry.
reflexión a mi misma: ahora mismo me siento la puta loca de los gatos en versión empalagosa, dios...si Harry pudiera andar me traería un revólver.
Los gatos llegaron al mundo para desmentir el dogma de que todas las cosas fueron creadas al servicio del hombre. Paul Gray
...sólo había que escuchar tu voz por la mañana para darse cuenta de que en realidad estabas preocupada y de lo mucho que te importa =)
ResponderEliminarpero como sabes, y aunque es normal que aún tengas miedo por si algo se complica, en un par de días tendrás a Harry tan arisca e independiente como siempre :)
En cuanto al gato cabrón presuntamente responsable del ataque (tengo que llevar cuidado por si encima me denuncia por calumnias), sólo repito una cosa que ya sabes: escopeta de perdigones.
En cualquier caso, creo que ésta sería una de las ocasiones en la que más habrías agradecido tener un revólver (te imaginas la cara del gato cabrón si te ve aparecer en la terraza y le apuntas entre ceja y ceja??)...